Beetlejuice Beetlejuice: Tim Burton no (me) decepciona

Lo más seguro es que si vas a ver la peli de Tim Burton la pases bien... pero mucho de lo que propone narrativamente deja un muy mal sabor de boca.

Beetlejuice Beetlejuice: Tim Burton no (me) decepciona

Lo más seguro es que si vas a ver la peli de Tim Burton la pases bien… pero mucho de lo que propone narrativamente deja un muy mal sabor de boca.

No me gusta Tim Burton. Lo siento… Sin embargo, hay dos películas suyas que siempre he defendido a capa y espada: El cadáver de la novia (porque me hace sentir bonito y porque Christopher Lee) y Beetlejuice, porque es hermosa, caótica y divertidísima. Por esto mismo, estaba súper emocionado de ver Beetlejuice Beetlejuice. Y ciertamente: me quebré de la risa de inicio a fin, Michael Keaton es espectacular y cierto personaje new-age-coach-de-vida nefasto me tuvo entre la carcajada y el cringe cada que apareció. La disfruté y lo más seguro es que, si la ves, también la vayas a pasar bien.

Sin embargo, mucho, mucho de lo que propone narrativamente me dejó con un muy mal sabor de boca. Porque deja de lado muy rápido el eje emocional que intenta construir, porque abre más arcos narrativos de los que puede cerrar, y porque hace que el personaje más interesante de la película se vuelva completamente inútil. 

En corto: Lydia Deetz (Winona Ryder) regresa a la casa de la cinta original para el funeral de su papá, acompañada de su madrastra (una Catherine O’Hara maravillosa), su hija (Jane Ortega) y su… ¿manager? ¿Casi algo? Mientras tanto, en el más allá, la exesposa de Beetlejuice regresa a la escena con un sólo propósito: chuparle el alma y redesvivir al bioexorcista. Lydia y su hija tienen un montón de problemas, porque la chamaca no cree en fantasmas y tiene unos resentimientos bien densos con su mamá, y porque la mamá nomás no sabe cómo tratar con ello. La historia es todo lo que sucede a partir de esto.

Ya. Esa es mi opinión sin spoilers, por si decides verla antes de regresar a leer el resto.

Lo bueno

No voy a decir que no tiene aciertos. Mantiene el tono y gran parte de lo bueno de la película original. En concreto, dos cosas:

Michael Keaton. Qué delicia es ver a un actor de esta categoría volver a uno de los personajes que lo hicieron lo que es y además ver cómo lo disfruta. Cada escena en que aparece se siente diferente, más viva (irónicamente), como si no hubieran pasado los años entre la primera vez que encarnó al personaje y ahora. La adición del personaje de Willem Dafoe también es una gozadera. 

Y lo segundo: no necesita ser buena. Independientemente de todas las críticas que pueda tener sobre el guion, me la pasé bien viendo la película. Muy bien. Es Tim Burton sabiendo que puede hacer lo que quiera y le va a funcionar.

Lo malo

Ahora sí: mi rant. Sin importar qué tan bien me la pasé en el cine, no puedo dejar de ver que la película decidió ser más Beetlejuice antes que ser una buena historia. Primero: no tiene un eje emocional claro. O sí lo tiene, pero lo abandona: reparar la relación entre tres generaciones de las mujeres en la familia. Eso se siente al principio… pero se siente secundario. Como si hubieran llegado a eso más por coincidencia que por intención. A diferencia de la primera película, que antes de todo el componente sobrenatural tiene a una pareja queriendo formar una familia, y eso es lo que nos hace empatizar con ellos. No siento algo similar en la secuela.

Y segundo: Cómo me enojé con el personaje de Delores (la ex de Beetlejuice). No por su personaje en sí, sino porque no hicieron nada con él. En serio: puedes quitarla de la película y la historia sigue siendo la misma. Y me enoja porque era un personaje con muchísimo potencial, que generó intriga y cuya figura bien hubiera podido colaborar al centro de la película. Pero no. 

Fin del rant

SOBRE EL AUTOR

E. Hauvery Cetina Karsten es un escritor y guionista mexicano, apasionado del cine y la comedia. Escribió el libro de poemas Nuestro sueño estéril y dirigió el cortometraje Casa Vacía